Fotografía de retrato resumen

 Hay que esforzarse para conseguir algo más que una fotografía de   una   persona: queremos  recoger  el espíritu de esa persona, del mismo  que el retrato hecho por un pintor transmite algo más que la apariencia física del modelo. Hay dos formas de fotografiar a la gente: haciendo retratos formales y retratos espontáneos.

Retratos formales

Cuando se hacen retratos formales, hay que conocer el  modelo, para saber quién es, y qué características de su personalidad queremos reflejar. Después hay que analizar la pose, el vestuario y el entornno, para que nos ayuden a reflejar lo deseado.

Lo primero  que  hay  que  hacer es buscar el lugar idóneo en el que situar a la persona y decidir la posición de la cámara.Es importante el el modelo esté relajado y tranquilo, y estar totalmente preparados para cuando entre en acción.

Un teleobjetivo corto -85, 105 o 135 milímetros- es la mejor elección para hacer retratos de primer  plano o de tres cuadros.  Es más favorecedor que un angular, además permite al  fotógrafo  alejarse  un  poco para no intimidar al sujeto.Para hacer retratos de ambiente es preferible utilizar objetivos normales o angulares, con  los  que  podremos  incluir  todo  el  cuerpo  o  toda  la habitación  en el encuadre vigilando siempre que no haya distorsión.  

Lo  mejor  es  observar  al  modelo  desde  varios ángulos a través del visor: de perfil, de tres cuartos, de frente, inclinando la cabeza,  y fijarse en cómo describe la cara del sujeto cada punto de vista.

La iluminación es el factor más importante en un retrato. Una luz suave y difusa es generalmente la mejor y la que más favorece, aunque hay ocasiones en que una fuerte iluminación lateral se adapta mejor a las características del modelo. Se debe esperimentar con varios tipos de luz.

La  iluminación  más habitual para hacer retratos consiste en colocar la luz principal  45º a un lado del modelo un poco por encima de su cabeza con un reflector en el lado opuesto para rellenar las sombras (se puede difuminar la luz).

Se puede incluir una luz más, para iluminar el pelo a contra luz (colocar la  luz  baja  y  directamente por detrás del sujeto, de modo que no se vea desde la posición de la cámara., o aumentar el brillo del fondo diriegiendo la luz hacia él).

Se deben tener en cuenta las características más relevantes de la persona (que pueden estar relacionadas a la profesión a la que se dedica); y se deben intentar diferentes ángulos.